Fondo documental  /  Ficha de actividades
()

Presentación Programa Comité técnico Galería


Resumen

El desmantelamiento de los buques fuera de uso para su desguace y reciclaje es uno de los grandes retos de sostenibilidad con los que se enfrenta el sector marítimo actualmente. La complejidad de la situación actual ha merecido la atención de las más importantes organizaciones reguladoras internacionales, la Organización Marítima Internacional (OMI), la Organización Internacional de Trabajo (OIT), el Programa Medioambiental de Naciones Unidas, la Unión Europea, asociaciones empresariales relacionadas con este sector y de los gobiernos de algunos de los países de mayor peso en el mundo marítimo. El objetivo es solventar los problemas y obstáculos con los que se enfrenta actualmente esta actividad industrial.

Los buques son unidades con un elevado contenido de materiales reciclables, en general superior al 90% en peso, siendo el resto materiales inertes no aprovechables y pequeñas cantidades (inferiores siempre al 1%), de sustancias contaminantes o potencialmente peligrosas (metales pesados, amianto y rastros de TBT, PCB, y otros). Por lo tanto, su reciclado puede hacerse de forma segura y sostenible. Sin embargo esta actividad ha dejado de ser competitiva para los países desarrollados frente a las instalaciones de desmantelamiento de buques de países como la India, Bangladesh o Pakistán en las que se trabaja con salarios bajísimos y son poco o nada exigentes con las normas relativas al medio ambiente y a la prevención de riesgos laborales.

En las condiciones actuales de mercado y de normativa internacional, el Convenio de Basilea se ha mostrado de muy difícil aplicación para los buques destinados al desguace, por lo que éstos siguen siendo enviados a instalaciones subasiáticas donde no se cumplen las normas relativas a la protección del medio ambiente, a la salud pública y donde no se exigen el cumplimiento de unas mínimas medidas de seguridad para los trabajadores. Por eso, en estos momentos, el sector permanece a la espera de la entrada en vigor del Convenio Internacional sobre esta materia que está preparando la OMI y de una normativa específica europea que establezcan las obligaciones a cumplir por todas las partes involucradas en esta actividad industrial.

El negocio del desguace es una importante actividad industrial que aporta un volumen de negocio de unos 1.000 millones de dólares americanos anuales y soporta una considerable carga laboral. Desde el punto de vista medioambiental, la reutilización de los 14 millones de toneladas de chatarra de acero que produce, ahorra la utilización de unos 33 millones de toneladas de mineral de hierro, carbón y fundente, evitando la emisión a la atmósfera alrededor de 30 millones de toneladas de CO2.

Sin embargo en estos momentos la mayor parte de la actividad se desarrolla en instalaciones insostenibles desde el punto de vista ambiental y social. Por ello y ante el previsible aumento de buques a desguazar a corto plazo, al entrar en vigor la normativa relativa a la retirada de servicio de los buques petroleros monocasco, los miembros del grupo de trabajo pusieron de manifiesto la escasez de instalaciones de desguace verdes. Convendría incentivar su creación con medidas, principalmente financieras, y la necesidad de la puesta en vigor, a la mayor brevedad posible, de la normativa internacional actualmente en desarrollo.



Volver Imprimir